[de El Mundo.es]

Gastón al habla
por JAVIER MARTÍNEZ

Escondido en el cuadro, sin etiqueta de cabeza de serie, Gastón Gaudio tuvo su partido más sencillo en los cuartos de final. Destrozó a Lleyton Hewitt sin intimidarse en la disputa de su primera presencia en esta ronda de un Grand Slam. La conferencia de prensa posterior fue hermosa, casi tanto como su golpe de revés. Gaudio es un jugador sin ínfulas, habla bajito y dice mucho. Tiene el encanto de todo ser atormentado, confiesa que muchas veces, recién terminado el juego, deseó irse a casa y no volver a tomar la raqueta.

"Ellos son los galácticos", dice sobre Coria y Nalbandián, a quienes considera varios peldaños por encima suyo. Lo cuenta sin celos, quizás como una pura estrategia personal. Pertenece a esa clase de seres que aspiran al anonimato, temerosos del escrutinio público. Dice que ahora empieza a gozar, a metabolizar el tenis de otra manera, que ha perdido ese afán perfeccionista tan dañino para su carrera.

Seguramente tiene razón y él nunca estará la altura de Coria o de Nalbandián, pues carece del esmero y la ambición de ambos. No es tan competitivo ni tan fuerte. Otra cosa es que cualquiera de sus partidos, incluso aquellos en los que abdica, dolido, triste, siempre dejen algún gesto, alguna instantánea, imposible de captar a largo de muy completas biografías coronadas por la mentira del triunfo.