01 diciembre 2003


TC



En una búsqueda desesperada por algo de emoción deportiva televisada y frustrado de tanto aburrimiento deportivo ( La Seleccion de Amargos, el campeonato bianchistico, el tenis de Gaudio, los modelos publicitarios que fueron a Australia a pasear, la pésima campaña de los Bucaneros, etc) me ví enterita la última carrera del TC. Como no tengo ninguna preferencia ni por el Chivo (me cae mas o menos simpático mi tocayo pero Ortelli tiene una cara de Garca que no se puede creer) ni por Ford (el gurí Martinez es un amargo pero Lalo Ramos un fenómeno ), ayer quería que gane Bessone.

Si bien no fué una cosa que digas "faaa que manojo de emociones!" (cada uno iba especulando con lo que hacía el otro), Bessone se mandó para adelante a buscar a Ortelli (ok, no le quedaba otra) e hizo un par de maniobras interesantes.

Ademas, ese final, con el tipo obnubilado por la deshidratación estuvo bien.

Ahora, el automovilismo, o cualquier otro deporte en donde la tecnología es el 80% del rendimiento, cómo hará para mantenerse vigente?. En la F1 se "viven" las carreras a lo Bielsa, a lo campeonato Bianchistico : de los cuatro con posibilidades , el que tarda menos en cambiar una goma , gana. En el TC, todavía hay una parte "humana" : toquecitos, Ford Vs Chivo, tres autos en abanico para que no pase uno... pero igual se tiene esa sensación de que ya hay mucho escrito de antemano. Ya hay mucha Tele, mucho Sponsor grande. Y lo que hace emocionante un deporte es el "acá puede pasar cualquier cosa".

No hay comentarios.: